viernes, 10 de octubre de 2008

Breves

Ya se acabaron las vacaciones. En contra de lo que se dice, las vacaciones rara vez suponen descanso. Y más, cuando se tienen niños. Así que vuelvo a descansar al trabajo. Pero un curso intensivo, un tribunal y el trabajo atrasado no me dejan tiempo ni para mirar el blog.





Los niños han empezado el cole y la guardería, respectivamente. Están cambiando cada día. Héctor está empezando a experimentar con la rebeldía y el "No quiero". A Ana le están saliendo, junto con los dientes, sus primeros sentimientos, que son transparentes: los celos, el desamparo, la alegría del reencuentro, el deseo y la frustración....




Ha empezado ya el resto de nuestra vida, que es ordenarnos la vida para ir corriendo de un lado a otro y que todo encaje, estar a una hora en determinado sitio, hacer coincidir nuestros horarios. Por la mañana sincronizamos los relojes y vivimos pendientes de lo que se retrasa el tren, de la media hora que me sobra para ir a comprar cualquier cosa. Echo de menos mis paseos desengrasantes por el Retiro, y mis rutinas anteriores. Ahora he aprendido a maldecir a la Renfe, a evitar pisotones, pero puedo leer en el transporte. Habrá que acostumbrarse.





Estoy leyendo un mamotreto de mil y pico páginas sobre el frente ruso de la Segunda Guerra Mundial. Cuando abro el libro en el tren, ya no estoy allí, estoy en otro sitio, es un viaje espeluznante, un libro que te araña y golpea, diverso, emocionante, sobrecogedor. Una experiencia necesaria. "Vida y destino" de Vassili Grossman.






Este año tu cumpleaños ha salido perfecto. Te quedaste a cuadros con el Scala Dei, que ha ganado por goleada a Nintendo y a Joss Whedon. Te salieron colorines por la cara, y la sonrisa sin sentido tardó mucho en borrarse. A ver cuando la abrimos.





He descubierto para mi sorpresa que cuento con una pequeña comunidad de lectoras anónimas y entusiastas de mis desvaríos, lo que me causa vergüencilla, orgullo y un puntín de presión en una propoción de 40%, 30% y 30%, respectivamente. Vaya este conjunto de retales dedicado para ellas.




Ah, y además la parte de la especie humana que más me gusta y más aprecio va a perpetuarse por segunda vez. Enhorabuena con todo nuestro cariño. Nos vemos en la tele.

2 comentarios:

Brujitecaria dijo...

En estos Breves siento muchas cosas juntas: reponsabilidad de escritor, cierto desánimo respecto a la vida, a los encajes de bolillos que supone, mucho amor a tu pareja A.,¡como disfrutas su cumpleaños!, sorpresa de cómo evolucionan tus cachorros... Se ve que eres joven, porque esto es una pequeña crisis: cuando eres mayor no te las puedes permitir, sólo está permitido vivir.

Ricar2 dijo...

La crisis ya casi ha pasado, pero sí, ha tenido una racha de crisis a varios niveles. Tienes buena vista, veterana.